Caminar por El Bierzo | ||
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La idea de publicar este conjunto de rutas nació con la pretenciosa intención de que pudiera servir para guiar en sus primeros pasos a los que entienden que, fuera de las ciudades, hay espacios acogedores que sólo esperan a ser descubiertos y gozados. Pero solo los primeros pasos. Por eso todas, o la mayor parte, son por camino o sendero y las descripciones exhaustivas. Los tramos sin camino servirán para que cada uno pueda medir los recursos de que dispone y para acostumbrarle a la montaña. Si en algún lugar la descripción no es suficiente, pido de antemano disculpas por no haber sido capaz de describirla con la necesaria claridad. Este trabajo no pretende enseñar a los que ya andan por la montaña. Los montañeros, lo sé por experiencia, no necesitan descripciones de rutas. Un mapa y sus conocimientos son suficientes para cualquier recorrido. Y si un día se falla, al menos se habrá aprendido otra lección. Lo que sí pretende es dar alguna idea de unas cuantas zonas del Bierzo en las que hay lugares interesantes, desde el punto de vista naturalístico, y algunas otras de fuera de la comarca pero que quedan a nuestro alcance. Son en total 42 las rutas descritas, aunque algunas estén repetidas dentro de otras más largas, pero siempre con algún matiz que creo que justifica su inclusión independiente. En cada ruta, el color bajo su número de orden nos indica la dificultad de la misma: verde, si es fácil, y rojo, si no lo es tanto. Esta dificultad pretende medir, de una manera subjetiva, la que existe para completar la ruta independientemente de que sea más o menos larga. Es decir, no mide el esfuerzo físico que necesitaremos para completarla, sino la facilidad o dificultad para seguirla. El esfuerzo físico necesario deberá ser calibrado por cada uno en función de la distancia y el desnivel, o en función del tiempo, ya que su valoración es tan subjetiva y entran en ella tantas sensaciones y preferencias personales que sería imposible darla con carácter general. También se indica en cada ruta el tiempo total o el parcial de algunos tramos. En el índice se indica el tiempo total de cada ruta. Estos tiempos deben entenderse tiempos empleados en andar y cualquier tiempo empleado en otra cosa distinta: comer, beber, contemplar el paisaje, descansar, etc, debe ser añadido al tiempo total. Además estos tiempos deben tomarse siempre como orientativos: se ha pretendido que sean tiempos medios, y no puede deducirse que somos unos atletas de que nuestro tiempo sea inferior al indicado, ni que seamos unas tortugas porque haya sido superior. Cada uno debe andar a su propio ritmo y su tiempo será, sin duda, el mejor. Hay un apartado en el que se trata de dar idea del paisaje que previsiblemente se encontrará, pero la Naturaleza no es una película y el ambiente puede cambiar mucho: una bonita cascada, seca, sólo es una roca. Hay también apartados dedicados a la flora y fauna que puede encontrarse: son muy generalistas. A parte de que es muy difícil predecir que es lo que va a encontrarse cada uno, sólo unas buenas guías nos permitirán identificar y disfrutar todo lo que veamos. No obstante se ha pretendido resaltar todo lo que puede ser más llamativo. En cada ruta se indican los posibles riesgos con que puede encontrarse el caminante. Pero la relación de estos no puede ser exhaustiva. Por una parte porque la Naturaleza puede presentar una infinidad de ellos y, por otra parte, porque cada uno busca los suyos propios y es imposible predecir lo que encontrará. Yo no creo que la montaña sea peligrosa para nosotros: somos nosotros los peligrosos, pero, como no podemos serlo para la montaña, lo somos para nosotros mismos o para los que nos acompañan. Y nos justificamos echando la culpa a la montaña, que estaba ahí y no hizo nada. La montaña está desde siempre, con su frío, con su calor, con su tormenta, con su lluvia y con su nieve, incluso con su nieve helada, con su ventisca, con su tempestad, con sus pedreras, con sus arroyos, con su buen tiempo: con todo lo que es montaña; y no pasa nada, no hay ningún peligro. Sólo cuando nosotros entramos en ese mundo que es la montaña, empezamos a hablar de riesgos: y existirán todos los que por nuestra falta de preparación o de equipamiento dejemos existir. Sólo la suerte o la desgracia influirán para que nos afecten o nos permitan salir indemnes. Por eso lo fundamental, en cualquier ruta, aun la mas fácil, es conocernos a nosotros mismos y saber hasta donde podemos llegar: todo lo que sea pasar de ahí es un riesgo. Se indican, finalmente, los mapas en los que puede ser seguida la ruta descrita. Conviene indicar que el Mapa Nacional a escala 1:25.000 está en elaboración y, por tanto, seguirán saliendo sucesivamente ejemplares de nuevas zonas, algunos de los cuales seguramente no son citados en el texto. Advertencias Siempre es muy agradable iniciar una excursión. Pero es más agradable terminarla con ganas de iniciar otra. Para ello es importante seguir algunas normas: - Debes consultar las Previsiones Meteorológicas antes de salir. Cuidado con las tormentas.
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Publicado por VRedondoF para TURISMO el 4/12/2009 09:48:00 AM